La economía de la provincia a la deriva: sin financiación y sin apoyos en Madrid
Ballester insiste en priorizar la vacunación como principal medida de reactivación económica contando con la colaboración público-privada
La provincia de Alicante comienza 2021 con datos de empleo y PIB de 2015
La situación se agrava aún más ante el enésimo retraso de la reforma de la financiación autonómica y posibles nuevos recortes de agua del trasvase Tajo-Segura
Alicante, 13 de abril de 2021.
INECA ha presentado esta mañana los resultados del Informe de Coyuntura Socioeconómica de la provincia de Alicante, correspondiente al cuarto trimestre de 2020. El último análisis trimestral del año se ha visto marcado por el agravamiento de la situación sanitaria que llevó al endurecimiento de las medidas administrativas limitantes de la movilidad. Estas circunstancias lógicamente han tenido un reflejo en los principales indicadores económicos, ralentizando el aparente despegue que observábamos al cierre del tercer trimestre y que nos hace regresar a 2015, año en el que empezábamos a salir de la crisis de 2008. El presidente de INECA, Rafael Ballester, ha asegurado que la economía de la provincia se encuentra a la deriva y necesita de los fondos europeos de una justa financiación para acometer grandes reformas estructurales que impulsen a la provincia como un territorio de oportunidades.
El Informe refleja que la provincia de Alicante ha cerrado 2020 con uno de cada cinco trabajadores en situación de desempleo y según datos del Banco de España, la previsión de la reducción del PIB en la provincia es del 13,5% -mayor que a nivel nacional que es del 11%- confirmando una reducción de la actividad superior a la media nacional. La reducción de la afiliación y el incremento del paro van de la mano del aumento del número de trabajadores autónomos en tiempos de pandemia y todas estas variables alimentadas por un cambio de hábitos en el consumo que reducen la intensidad de la demanda.
A juicio del presidente de INECA, uno de los sectores que más afectados por esta situación de vaivén es la actividad turística, sector predominante en nuestra economía provincial y con múltiples implicaciones a lo largo de nuestro territorio. Pero también la industria se resiente, y especialmente el sector del calzado se encuentra ante datos que reflejan una compleja encrucijada afectada por variables que ya estaban presentes antes de la pandemia, y que se han acelerado y complicado de forma relevante.
Al respecto, el director de Estudios, Francisco Llopis, agrega que las exportaciones de calzado han caído un 20% y las pieles un 30% debido a la parálisis de mercados internacionales y a los cambios de hábito derivados de la pandemia y las restricciones a la movilidad.
Vacunación y recuperación
Ballester considera que “son muchas las incertidumbres que hoy impiden valorar cuándo comenzará la senda de la recuperación y cuánta será su intensidad. La principal razón para esta incertidumbre es, sin duda, la derivada del proceso de vacunación”. Por esta razón, INECA insiste en que la mejor receta para la economía es, como reconocen los expertos, “vacunar, vacunar y vacunar”. Esta acción debe ser la prioridad de todas las administraciones, que deben apoyarse sin complejos en la colaboración público-privada y aprovechar los ofrecimientos de las empresas para vacunar a sus trabajadores, optimizando los recursos públicos y acelerando la reactivación que tanto necesita la economía y la población alicantina”.
Al mismo tiempo, insisten desde INECA, que la administración debe persistir en la ayuda directa a los sectores y personas más afectadas, pues aún hay muchos colectivos al límite de la supervivencia. Respecto a los Fondos Next Generation, Ballester ha señalado que “si no se hace un diseño inteligente y adaptado a los territorios y sectores económicos, corremos el grave riesgo de que la ingente cantidad de dinero público y privado que va a movilizarse no sirva para reparar los severos daños que la economía regional y provincial está soportando. Por esta razón, el diseño de estos fondos y su aplicación deben tener en cuenta nuestras debilidades, corrigiéndolas, y nuestras fortalezas, potenciándolas”.
En su opinión, toda inversión económica en nuestra provincia “debe servir para atender las necesidades presentes y futuras de un territorio que se enfrenta a esta crisis con una tasa de desempleo cercana al 20%, especialmente incisiva con los jóvenes y con los mayores de 45 años, una renta y salarios bajos, un reducido tamaño empresarial, y una demografía con tendencia al envejecimiento”. Y para ello, estos flujos de inversión “deben estimular, potenciar y reforzar algunos de nuestros principales recursos: el turismo y sus diferentes manifestaciones como nuestra seña de identidad, una industria creativa y con marca reconocida, y un incipiente ecosistema de transformación digital que debe ser un agente fundamental del cambio”.
A su vez, Francisco Llopis resalta que los territorios que más avanzan no son los que disponen de más de recursos sino los que hacen mejor uso de sus recursos por lo que no podemos permitir que una de cada cinco personas en edad laboral esté sin realizar una actividad productiva.
Como dato positivo, Alicante mantiene el 5% de representación en el número de nuevas sociedades mercantiles en España y Llopis confía en que estos nuevos proyectos empresariales aporten la necesaria innovación y exigencia competitiva de los nuevos mercados para ir regenerando el tejido productivo de la provincia.
Problemas históricos y pendientes
El presidente de INECA señaló que “el debate y las incertidumbres en torno a los fondos Next Generation y, sobre todo, la crispación de una política en bucle electoral continuo, no deben servir de cortina de humo para esconder cuestiones que son trascendentales para el presente y futuro de nuestra provincia. Seguimos a la espera de la reforma del sistema de financiación autonómica que permita la reparación de décadas de injusticia presupuestaria y necesitados de una inversión pública que reconozca el rol que nuestra provincia juega a nivel global en el conjunto de la nación”. Ambas cuestiones siguen, en opinión de INECA, son relegadas al furgón de cola de las prioridades del Estado y son indispensables para retomar la senda del crecimiento sostenible.
Ballester ha finalizado su intervención exhortando a un cambio en las intenciones de Ministerio de Transición Ecológica, señalando que “no nos podemos resistir a denunciar el inoportuno agravio que estamos a punto de sufrir, si nadie lo remedia, en materia de agua. La modificación de las reglas de explotación del Trasvase Tajo-Segura, fuera de los cauces legales previstos, y apenas comenzado el proceso de revisión de la planificación hidrológica del Tajo, Segura y Júcar, pone en jaque el conjunto de la economía provincial”. En opinión de INECA, “estaríamos de nuevo ante una nueva muestra de la escasa sensibilidad que se tiene en algunos despachos ministeriales respecto a la que hace no tanto era la cuarta economía de España, hoy a la deriva por la falta de apoyos y estímulos”.